El Centro Cultural Herediano Omar Dengo celebra 15 años de promover la cultura y el arte en la provincia de las flores. Su esencia de rescatar la memoria histórica del país, así como sus costumbres y tradiciones, se amalgama con la belleza de este importante edificio que fue construido a finales del siglo XlX.
La infraestructura inaugurada en 1896 fue creada para albergar la Escuela República Argentina. Este centro educativo vio pasar por sus aulas a importantes figuras de la política, el deporte y la vida cultural del país. En 1987, el edificio fue declarado Patrimonio Histórico Arquitectónico, según decreto N°17514-C del 19 de mayo de 1987.
Con el transcurrir de los años, dicho centro educativo se convirtió en el Centro Cultural Herediano Omar Dengo, sustentado en la Ley 8618, cuya inauguración se realizó el 14 de abril del 2010.
“El edificio del Centro Cultural es parte de los 18 edificios patrimoniales con los que cuenta el cantón de Heredia y que además en noviembre del 2019 se le otorgó el Escudo Azul de la UNESCO. Su importancia radica en que fue el primer edificio construido para ser un centro educativo y que en sus inicios fue la Escuela de Aplicación de la Escuela Normal”, detalló, Angie Gutiérrez Chaves, Encargada del Centro Cultural Herediano Omar Dengo.
Hoy en día, el inmueble se destina para facilitar el desarrollo artístico y cultural autóctono de Heredia, comprometido con la defensa del patrimonio cultural, su conservación y promoción. Dispone de 8 salones y un anfiteatro en los que se promueven el baile popular, las artes escénicas, artes plásticas, fotografía, bailes folclóricos, entre otras iniciativas.
“Actualmente, la administración del Centro está a cargo de la Municipalidad de Heredia, quien, por medio del Encargado del Centro Cultural Herediano Omar Dengo, administra la agenda programática del edificio y la atención de las solicitudes presentadas por las personas e instituciones que desean realizar sus actividades en el inmueble, así como la gestión de actividades propias del Centro para el disfrute y aprovechamiento de la comunidad”, concluyó Gutiérrez.
